
Con la llegada de la temporada estival y el aumento de la población flotante en las costas de Chile, el riesgo de contacto con la fragata portuguesa se incrementa. Esta especie marina, conocida por su belleza y peligrosidad, es una amenaza para los bañistas y turistas que se adentran en el mar. En este artículo, exploraremos qué es la fragata portuguesa, cómo identificarla, cómo prevenir su picadura y qué hacer en caso de contacto, además de las medidas que pueden tomarse ante su presencia en las playas.
¿Qué es la Fragata Portuguesa?
La fragata portuguesa (Physalia physalis) es un tipo de hidrozoo flotante de la familia Physaliidae. Aunque muchas personas la confunden con una medusa debido a su apariencia similar, la fragata portuguesa no es una medusa, sino un organismo colonial que se compone de varios individuos especializados que cumplen funciones diferentes. Se caracteriza por su flotador, una estructura gelatinosa que le permite mantenerse a flote en la superficie del agua.
Este flotador tiene una forma de burbuja alargada, y su color varía entre el transparente y el azul violáceo. Su tamaño puede alcanzar entre 10 y 30 centímetros de largo, lo que la hace fácilmente reconocible a simple vista. A pesar de su apariencia atractiva y casi etérea, la fragata portuguesa es altamente peligrosa debido a los poderosos tentáculos que cuelgan de su flotador.
La Aparición de la Fragata Portuguesa en el Pacífico
Aunque la fragata portuguesa es más comúnmente encontrada en las aguas cálidas del mar Caribe y el Océano Atlántico, su presencia en las costas del Océano Pacífico ha ido en aumento en los últimos años. Este fenómeno podría estar relacionado con alteraciones meteorológicas temporales, como el fenómeno de El Niño, que provoca un aumento de la temperatura del agua en el océano y altera las corrientes marinas.
Desde el 2014, se ha registrado la presencia de fragatas portuguesas en las costas de las regiones de Arica y Puerto Montt, incluyendo la isla de Rapa Nui. La variabilidad climática y los cambios en las corrientes oceánicas parecen ser factores que contribuyen a su desplazamiento hacia nuevas áreas, poniendo en alerta a las autoridades sanitarias y medioambientales.
Riesgos y Peligros de la Fragata Portuguesa
El principal peligro de la fragata portuguesa radica en su capacidad para liberar un veneno a través de sus tentáculos, que puede causar graves daños a la piel humana. Aunque se encuentra flotando en la superficie del agua, sus tentáculos pueden extenderse por varios metros, y su contacto puede resultar en un dolor intenso, similar al de una quemadura, y enrojecimiento de la piel. El veneno de la fragata portuguesa contiene una neurotoxina que puede ser extremadamente dolorosa e incluso peligrosa en ciertos casos, causando reacciones alérgicas graves en algunas personas.
Es importante destacar que, incluso si la fragata portuguesa está muerta, sus tentáculos pueden seguir siendo peligrosos, ya que continúan siendo tóxicos durante un tiempo después de que el animal haya fallecido. Esto subraya la importancia de no tocarla ni en el mar ni en la playa.
Cómo Identificar una Fragata Portuguesa
Una de las claves para prevenir los riesgos asociados con la fragata portuguesa es saber identificarla correctamente. La fragata portuguesa se caracteriza por su flotador, que es transparente o azul violáceo y tiene una forma alargada y de burbuja. Este flotador puede medir entre 10 y 30 centímetros de largo y es lo primero que se ve al observarla en la superficie del agua.
Debajo de este flotador cuelgan los tentáculos, que pueden extenderse varios metros y son delgados y de colores que van desde el azul hasta el púrpura o el rojizo. Estos tentáculos son los que contienen las células urticantes que liberan el veneno al entrar en contacto con la piel. Al reconocer el flotador y los tentáculos, los bañistas pueden actuar con precaución y evitar el riesgo de picaduras.
¿Qué Hacer si Aparece una Fragata Portuguesa en la Playa?
Ante la presencia de una fragata portuguesa en la playa, la primera recomendación es mantener la calma y evitar cualquier tipo de contacto. Si se avista una fragata portuguesa en el agua o en la arena, es crucial tomar las siguientes precauciones:
- No bañarse ni realizar juegos en el agua: Si se sabe que hay fragatas portuguesas en la zona, es mejor evitar nadar o hacer deportes acuáticos. Las corrientes marinas pueden arrastrar a las fragatas a la orilla, aumentando las posibilidades de contacto.
- No tocar la fragata portuguesa: Nunca se debe tocar la fragata portuguesa, ni si está viva ni si está muerta. Aunque parezca inofensiva, sus tentáculos continúan siendo peligrosos. El contacto con ellos puede resultar en una picadura dolorosa.
- Protégerse al caminar por la arena: Si se está caminando por la playa, se debe usar ropa y zapatos protectores, ya que los tentáculos pueden estar esparcidos por la orilla.
- Prevenir es la mejor opción: La mejor forma de evitar un accidente con una fragata portuguesa es prevenir el contacto. Si se encuentra en una zona donde se sabe que hay presencia de fragatas, es recomendable mantenerse alejado de las áreas donde se las haya visto.
¿Qué Hacer en Caso de Recibir una Picadura de Fragata Portuguesa?
Si a pesar de las precauciones, alguien recibe una picadura de fragata portuguesa, es importante saber cómo actuar para minimizar el daño y aliviar el dolor. Las picaduras de fragata portuguesa suelen causar un dolor intenso, similar al de una quemadura, junto con enrojecimiento y, en algunos casos, hinchazón.
A continuación, se detallan los pasos a seguir en caso de recibir una picadura:
- Lavar la zona afectada con agua de mar: Es fundamental lavar inmediatamente la zona afectada con agua de mar. Esto ayudará a eliminar cualquier residuo de tentáculos y a reducir la cantidad de veneno en la piel. No se debe utilizar agua dulce, ya que puede activar más veneno y empeorar la situación.
- Retirar los restos de tentáculos: Con un objeto plástico liso, como una cédula de identidad o una tarjeta, se debe retirar con cuidado los restos de tentáculos. No se debe tocar la zona con las manos desnudas para evitar más picaduras.
- Aplicar vinagre blanco: Si se tiene vinagre blanco a mano, se puede aplicar sobre la picadura o sumergir la zona afectada entre 15 y 30 minutos. El vinagre ayuda a neutralizar el veneno y reduce el dolor.
- Evitar ciertas sustancias: No se debe usar alcohol, orina, agua potable, bicarbonato de sodio, bebidas, jugo de limón ni protector solar, ya que estos pueden empeorar la picadura.
- Buscar atención médica: Si los síntomas persisten o empeoran, como dificultad para respirar, mareos o una reacción alérgica severa, es crucial acudir al centro de salud más cercano. La picadura de fragata portuguesa puede ser grave, y el tratamiento médico adecuado puede ser necesario.
¿Cómo Denunciar la Presencia de Fragata Portuguesa?
Si se detecta la presencia de fragatas portuguesas en una playa, es importante que las autoridades sean informadas para tomar las medidas adecuadas y evitar que más personas sufran picaduras. En Chile, se puede denunciar la presencia de la fragata portuguesa a la Armada de Chile llamando al número 137 o a Salud Responde al 600 360 7777. En este último número, también se pueden resolver dudas o realizar consultas sobre cómo actuar frente a una picadura o cualquier otro riesgo relacionado con la fragata portuguesa.
La fragata portuguesa es una especie marina fascinante pero peligrosa, cuyo aumento en las costas del Océano Pacífico presenta un riesgo para la seguridad de los bañistas durante la temporada estival. Saber identificarla, prevenir el contacto y actuar rápidamente en caso de una picadura puede hacer la diferencia entre una molestia temporal y una complicación grave. Con la debida precaución y el conocimiento adecuado, se puede disfrutar de las playas y del mar de manera segura, sin tener que temer el encuentro con esta venenosa especie marina.