
Cada invierno, las bajas temperaturas representan un grave riesgo para las personas en situación de calle. Frente a este escenario, el Gobierno de Chile ha implementado el Código Azul, una estrategia de emergencia que se activa cuando los pronósticos meteorológicos anuncian temperaturas iguales o inferiores a 0 °C, o iguales o inferiores a 5 °C en combinación con lluvias o agua nieve.
Este plan permite reforzar las acciones destinadas a proteger a quienes más lo necesitan. La activación del Código Azul implica la puesta en marcha de operativos móviles adicionales, los cuales recorren las calles entregando alimentación, abrigo y traslado hacia albergues y refugios habilitados, en caso de ser necesario o a solicitud de la persona afectada.
Activación por bajas temperaturas
Debido a las condiciones climáticas anunciadas por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), el Código Azul se ha activado desde las 17:00 horas de hoy hasta el viernes 13 de junio a las 13:00 horas. Esta medida se concentra especialmente en las comunas de la zona centro sur del país, donde las lluvias y el descenso térmico se combinan, elevando el riesgo de hipotermia y otras complicaciones de salud para quienes viven en la intemperie.
¿Cómo puede colaborar la ciudadanía?
Frente a estas situaciones, la empatía y solidaridad ciudadana juegan un rol fundamental. Si una persona presencia a alguien en situación de calle durante estos episodios de frío extremo, puede levantar una alerta las 24 horas del día. Para hacerlo, se debe llamar al Fono Calle 800 104 777 (opción 0) o ingresar al sitio web oficial del Código Azul.
Estas alertas permiten una respuesta más rápida por parte de los equipos en terreno, quienes pueden acercarse a brindar ayuda o trasladar a la persona a un lugar seguro.
Monitoreo y respuesta estatal
El Gobierno mantiene un monitoreo diario del nivel de ocupación de los albergues y refugios habilitados en todo el país, lo cual permite adaptar rápidamente la oferta disponible según la demanda y las condiciones meteorológicas. Este sistema de vigilancia y acción ha sido clave para evitar tragedias durante los inviernos más crudos.
Inversión sin precedentes
Este 2024, el Gobierno ha marcado un hito en la inversión destinada a proteger a la población en situación de calle. Por primera vez se ha alcanzado la cifra de 100 ejecutores públicos, lo que refleja un mayor compromiso del Estado en esta materia. Además, se cuenta con 39 ejecutores privados, generando un equilibrio más justo en la distribución de responsabilidades entre el Estado y las organizaciones colaboradoras.
En suma, el Código Azul no es solo una respuesta ante el frío: es un reflejo de cómo una sociedad puede organizarse para proteger la vida y la dignidad de todos sus miembros, especialmente de quienes se encuentran en mayor vulnerabilidad. La acción coordinada entre autoridades, instituciones y ciudadanos es vital para enfrentar el invierno con humanidad y compromiso.